Bacon, carne y cáncer: que no cunda el pánico

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Tras el anuncio de la OMS se extiende el miedo al cáncer por comer bacon y otras carnes. En realidad hay poco que temer.
Así que la IARC, parte de la Organización Mundial de la Salud, ha incluído al delicioso bacon en la lista de carcinógenos, es decir, sustancias que producen cáncer, en compañía del tabaco y el plutonio. También la carne roja ha sido clasificada en otra lista como posible carcinógeno. ¿Quiere esto decir que debes dejar de comerlos? Pues no.
En el grupo de cosas que causan cáncer, el bacon está en buena compañía: también están el alcohol, el cromo, los polvos de talco, los rayos UVA y la luz del sol. Ah, y los estrógenos, que inevitablemente tienes dentro de tu cuerpo, y los anticonceptivos orales.
La IARC, Agencia Internacional de la Investigación sobre el Cáncer, mantiene esta lista para separarla de las cosas que se sabe que no causan cáncer. Pero lo verdaderamente importante no es que lo causen. Vivir incrementa tu riesgo de padecer cáncer.
El problema es cuánto cáncer pueden causar esos elementos, y en qué dosis son peligrosos.
Se ha publicado que comer bacon todos los días incrementa en un 18% el riesgo de sufrir cáncer de colon. Pero eso no quiere decir que tengas un 18% de probabilidades de sufrirlo. Si el riesgo total de padecer cáncer de colon a lo largo de tu vida es de un 3% o 4%, hay que calcular que es un 18% de esa pequeña probabilidad. En realidad, pasas de un riesgo del 5% a un riesgo del 6%.
Compáralo con el tabaco, que incrementa tu riesgo de padecer cáncer de pulmón en un 2.500%. Puede que estén en el mismo grupo, pero no están en la misma liga ni de lejos.
¿Comes bacon para desayunar, chuletas para comer y hamburguesas para cenar todos los días? Entonces tienes que parar. Estás aumentando innecesariamente la concentración de nitritos y nitratos, que por acumulación día tras día aumentarán tu riesgo, aunque sea poco.
Busca fuentes variadas de proteínas, alterna ese bacon, chorizo y chuletas a la brasa con pescado, huevos y lácteos. Pon un buen montón de verduras en el otro lado del plato (protegen contra el cáncer) y sigue viviendo con tranquilidad.
Foto: steak with bacon and spices, de Shutterstock, no reutilizar