Aditivos E que son buenos para ti

aditivos E

Si te aterrorizan los aditivos en tu comida, es que necesitas más información.

Si te dijera que tomes E-300 y E-160d pensarías que estoy loco, o a sueldo de la industria de comida rápida y precocinada, ¿verdad? Sin embargo, con la excepción de ciertas alergias, los aditivos con la letra E son inocuos. No solo eso, algunos son beneficiosos para tu salud.

¡Pero esos aditivos son químicos!, oigo al fondo.

Así es. Y el brocoli. Y tú también eres química. Nos gusta la química. Bienvenidos a este universo.

nos gusta la química

La vitamina C (e-300) obtenida en un laboratorio es igual de buena para ti que la contenida en un kiwi. ¿Sabes por qué? Porque la molécula de ácido ascórbico es la misma, y tu cuerpo no puede distinguir de dónde procede. Por el contrario, si te atiborras de pan con miel es muy probable que engordes y termines con diabetes tipo 2, por mucho que la miel sea ecológica y el pan de pueblo.

Al contrario que muchos alimentos, todos los aditivos E han pasado una serie exhaustiva de pruebas para asegurarse de que no producen efectos adversos. Por supuesto que hay un porcentaje pequeño de personas que tienen alergia a alguno de ellos, igual que algunas personas son alérgicas a los cacahuetes o a soja.

Estos son algunos de los aditivos que te alegrará encontrar en tu comida:

  • E-300: Vitamina C, se utiliza como antioxidante en la comida, y protege también tu sistema inmunitario del estrés.
  • E-101: Riboflavina o vitamina B2, se usa como colorante, pero también ayuda a regular la función tiroidea y la producción de sebo en la piel, por lo que es buena para el acné y el pelo graso.
  • E-100: Curcumina, es el colorante amarillo que se usa en el curry, y tiene propiedades antiinflamatorias.
  • E-163: Antocianinas, se extraen de la piel de las uvas negras para usarlas como colorante, pero también son un poderoso antiinflamatorio y antioxidante.
  • E-160d: Licopeno, colorante rojo que se extrae del tomate y ayuda a proteger la piel de la radiación solar.

Dicho esto, evita comer alimentos procesados, pero no por los aditivos, sino por todo lo demás. Los alimentos procesados contienen demasiada azúcar, grasas trans, almidón y muy pocas proteínas.

Deja ya de preocuparte por los aditivos, y equilibra tu dieta reduciendo y azúcares, almidón, aumentando las proteínas y las grasas saludables. Y sobre todo, mueve tu cuerpo.

Foto: jello and iced cup cakes, de Shutterstock, no reutilizar