La paradoja de los esquimales


Según la medicina occidental, los esquimales deberían estar muertos. Sin embargo están más sanos que cualquiera de nosotros.
Fuera, temperaturas de menos de 30 grados bajo cero. No es el mejor sitio para plantar tomates y lechugas. Los esquimales han comido desde hace miles de años lo que tenían a mano: morsa, aceite de foca, alce, pato, mucho pescado, cangrejos, piel de ballena con su grasa, pescado fermentado, y durante el corto verano, algas y bayas.
La dieta tradicional de los esquimales es casi por completo grasa y proteínas. Ni cereales de desayuno, ni pan, ni patatas. Casi nada de fruta y verdura fresca. Según las ideas dominantes en la nutrición en los últimos años, deberían morir de arterioesclerosis a los 40, y el hígado les debería reventar por el exceso de proteínas. En lugar de eso, disfrutan de vidas largas sin obesidad, ni diabetes, ni enfermedades cardíacas, ni caries, ni cáncer.
Sin embargo, los esquimales que han adoptado la dieta occidental, y que ahora compran en supermercados, engordan, tienen cáncer y diabetes, igual que los occidentales.
La paradoja de los esquimales demuestra que no hay alimentos esenciales, sino nutrientes esenciales. Las vitaminas A, D y E las obtienen de la grasa de los animales. La vitamina C, del colágeno de la piel y los órganos, consumidos crudos. Los minerales, del pescado, la carne y los huesos. La energía, de la grasa.
Hay quien dice que los esquimales desarrollaron una adaptación genética a esa dieta, pero es poco probable y no está demostrado. Además, así como los esquimales de supermercado enferman, los exploradores occidentales de principio de siglo se adaptaron sin problemas a la dieta esquimal. Curiosamente, aquellos exploradores que tomaban solo carne magra y se negaban a comer grasa y órganos, desarrollaban el llamado mal de caribú, intoxicación por exceso de proteínas magras, o escorbuto, por falta de vitamina C.
¿Es recomendable la dieta esquimal? Sí, pero por desgracia tú no puedes seguirla. La dieta esquimal se parece a la famosa dieta Atkins: grasa y proteína. Hay sin embargo varias condiciones por la que a los esquimales funciona bien y la dieta Atkins no. La grasa tiene que ser de animales salvajes, rica en Omega 3. No sirven los de granja. Hay que comer todas las partes del animal: piel, grasa, órganos, tuétano, e incluso los ojos. La mayor parte crudo o fermentado. No está dentro del alcance (ni del gusto) de todo el mundo.
¿Hay testículos de alce fermentados en tu supermercado? En el mío tampoco.
Foto: United Nations Photo