Un plan en dos fases que te librará de la grasa localizada


No puedes perder grasa de donde tú quieras pero sí puedes atacar la grasa con este plan para activar las zonas más testarudas que no responden al ejercicio.
La grasa localizada es testaruda, es esa que se aferra a nuestras caderas o nuestra barriga y que incluso cuando perdemos peso se resiste a desaparecer. Es la primera en aparecer cuando engordas y la última en irse cuando adelgazas. ¿Qué hacer? La mala noticia es que es imposible eliminar la grasa localizada sin recurrir a la cirugía. La buena es que es posible atacar toda la grasa de tu cuerpo, y usar varios trucos para despertar a esas células perezosas con un plan de acción en dos fases.
Las células de grasa (y muchas otras) tienen receptores en sus membranas sensibles a la adrenalina y la noradrenalina, las hormonas que nos activan para la acción. Hay varios tipos, pero los llamados receptores beta, cuando son estimulados por la adrenalina, por ejemplo, al hacer deporte, aumentan la circulación sanguínea y obligan a las células a liberar grasa. Pues bien, las células de grasa resistente como las de las caderas en las mujeres o la barriga en los hombres tienen hasta diez veces menos receptores beta. Son células sordas.
La solución tradicional para perder grasa es comer menos y hacer más ejercicio. Esto no funciona porque al final reduce tu metabolismo basal, y lo que necesitas precisamente es aumentarlo. Así que quedan dos soluciones:

  • Comer menos y hacer menos ejercicio para matar de hambre a las células de grasa
  • A continuación, comer más y hacer más ejercicio para alimentar a los músculos, que son el tejido que te permite quemar más grasa

Alternando estas dos fases conseguimos algo muy importante: despistar a tu metabolismo e impedir que se adapte. Cuando
Las fases se deben alternar en ciclos de dos semanas, evitando que tu cuerpo se adapte a una u otra.

Fase uno: come menos, haz menos ejercicio

Duración: 2 semanas
come menos muévete menos
Dieta
La idea en esta fase es tomar tres comidas al día. Dos de ellas son proteínas con verduras, sin almidones. El almidón (arroz, pan, pasta, patatas) se puede comer en una sola comida, preferentemente después de hacer deporte. Deberías tomar menos de 100g de carbohidratos totales al dia.
Ejercicio
El ejercicio de fuerza en el gimnasio se reduce a dos días por semana. Esto se complementa con tres días de descanso y actividades suaves, como yoga o estiramientos, pero a cambio hay que aumentar la actividad de baja intensidad caminando al menos una hora al día, todos los días.

Fase dos: come más, haz más ejercicio

Duración: dos semanas
come más haz más ejercicio
Dieta
Si estuvieras luchando por tu vida todos los días necesitarías más comida, y eso es lo que vas a hacer. Tomarás tres comidas al día, incluyendo almidón en dos de ellas: antes y después de entrenar. Además suplementarás con proteínas adicionales en el almuerzo y merienda.
Ejercicio
La idea es moverse todos los días como si te persiguieran los zombies, con días más intensos y días más tranquilos, pero sin poder parar nunca: tres días de pesas, dos días de cardio metabólico, y dos días de actividad suave, como paseos.