El cardio ¿antes o después de las pesas?

cardio pesas antes depués
Crees que primero una clase de ejercicio aeróbico, o correr en la cinta, y después un poco de máquinas, ¿verdad? Pues no.
Es una pregunta que se repite constantemente: ¿Hacer cardio antes del entrenamiento de pesas o después? Especialmente en el caso de las mujeres, la visita al gimnasio consta de una clase colectiva de ejercicio cardiovascular, o una hora en la temida máquina de escalera, seguida de unos minutos de máquinas. Esto es un error.
Lo primero es clarificar el cuerpo que quieres. Tú no quieres tonificar, porque la tonificación no existe. Quieres un cuerpo con más músculo y menos grasa. Si pierdes músculo, te conviertes en un delgado gordo, y te será mucho más difícil perder peso.
Para mantener tu masa muscular, o ganar músculo, hay que hacer tres cosas:

  1. Estimular el músculo con intensidad, llegando al 80-100% de tu máximo
  2. Comer, especialmente proteínas
  3. Descansar adecuadamente, evitando ejercitar el mismo músculo dos días seguidos

Esto es lo que ocurre cuando haces primero cardio: el ejercicio cardiovascular consume el glucógeno de tus músculos. Cuando haces pesas después del cardio, tus músculos no pueden llegar a su máximo esfuerzo, porque están fatigados y no les queda suficiente combustible. Es menos efectivo.

¿Cuál es la mejor forma de entrenar? En el sistema propuesto en el libro de Operación Transformer se utilizan días alternos para las pesas y el cardio, ya que así se maximiza la cantidad de músculo ganado y la cantidad de grasa quemada.

Si haces pesas primero, tus músculos están frescos. Eso quiere decir que puedes levantar más peso, más veces, y así estimular a tus músculos para que crezcan.
Hacer pesas primero también te ayuda a quemar grasa. Cuando haces cardio suave a continuación, has agotado una mayor parte del glucógeno de tus músculos, y tu cuerpo se ve obligado a usar la grasa como combustible.
Empieza con un calentamiento suave de no más de 5 minutos, y lánzate a por las pesas, intentando llegar al tu límite cada día. Después, puedes hacer unos 30-45 minutos de cardio suave, durante los cuales quemarás sobre todo grasa. Así tienes lo mejor de los dos mundos: más músculo y menos grasa.
Si te tomas en serio hacer crecer tus músculos, como les ocurre a muchos hombres, entonces debes dejar el entrenamiento cardiovascular en días separados del entrenamiento de pesas. El cardio de intervalos, como el cardio estratégico, es más efectivo que el de ritmo constante.
Foto: male athlete running, woman lifting weights, de Shutterstock, no reutilizar