Esos músculos que no sabías que tenías


Si aprovechas el verano para ponerte en forma, cuida de tus músculos olvidados.
Mientras te preocupas de tus pectorales, bíceps, tríceps y cuádriceps, hay otros músculos en tu cuerpo que viven en la sombra, y sin embargo son imprescindibles. Si los mantienes en forma y estirados tendrás más fuerza y menos lesiones. Estos son tus amigos invisibles:
serratoSerratos: son esos músculos estriados que se marcan debajo y a los lados de los pectorales, y sirven para rotar las escápulas. Si cuando haces flexiones en el suelo tus escápulas sobresalen, tienes unos serratos débiles, y eso afecta a la fuerza en tu tronco. Cambia un ejercicio de pectoral por flexiones de serratos: apoyando las manos en un banco, al subir empuja el centro de la espalda hacia el techo, cuidando de no sacar las escápulas. Si te salen “alas” al hacer las flexiones, lo estás haciendo mal.
Psoas: este músculo conecta las piernas con la espalda, y es el que te permite levantar una pierna si estás sentado. Precisamente, por estar sentado demasiado tiempo se puede comprimir, y la tensión provocar dolores de espalda. Para fortalecerlo, siéntate y levanta una pierna todo lo que puedas sin echar la espalda hacia atrás, luego la otra. Para estirarlo, da una gran zancada y baja todo lo que puedas con la espalda recta.
Antebrazos: a no ser que hagas pesas, los antebrazos pueden debilitarse muy fácilmente. La prueba de fuego es cuando necesitas pedir ayuda para abrir un tarro de conservas. Los flexores de los dedos dependen de los músculos del antebrazo para ejercer fuerza. Utiliza una barra o una mancuerna para hacer movimientos hacia arriba, primero con las palmas hacia abajo y girando hacia arriba, como si aceleraras en una moto, y después con las palmas hacia arriba.