Agujetas: verdades y mentiras

agujetas
Parece increíble, pero hacer más ejercicio te ayudará a reducir el dolor de las agujetas.
Si estás siguiendo la Operación Transformer, lo más seguro es que tengas agujetas. Ya sabes que tener agujetas no es malo. Al contrario, es una señal de que tus músculos están creciendo. Sin embargo, si podemos evitar sufrir más de la cuenta, mejor.
Durante muchos años se ha especulado sobre la causa de las agujetas, que en términos médicos se llama dolor muscular postesfuerzo de aparición tardía (DOMPAT), en inglés DOMS (delayed onset muscular soreness). Aún hay cosas que no se entienden del todo sobre as agujetas, pero es hora de quitarse de encima algunos mitos e ideas que han demostrado ser falsas.
Por ejemplo, ahora sabemos es que la teoría de la acumulación de ácido en los músculos es falsa. ¿Cómo lo sabemos? Porque las personas con la enfermedad de McArdle, que no pueden producir ácido láctico, también tienen agujetas. Además, el ácido láctico es un combustible de los músculos, no es un subproducto del ejercicio.
La explicación más probable es que el dolor y la inflamación se producen por la rotura de las microfibras musculares durante el esfuerzo. Ya sabes que la rotura de microfibras es imprescindible para mejorar, ya que después tu cuerpo se adapta, y regenera tus músculos haciéndolos un poco más grandes y fuertes que antes.
Mientras tanto, ¿qué hacer con el dolor de las agujetas? Si esperas, desaparecerá en un par de días. Pero si puedes paliar el sufrimiento, mejor. Esto es lo que debes y no debes hacer:

Foto: Young man is in pain, de Shutterstock. No reutilizar.