Cómo enfrentarte al miedo


Si no avanzas con tu vida, tu cuerpo o tu mente, puede que lleves una pesada carga encima: tu miedo.
El miedo mata la mente, como bien se puede leer en Dune. Muchas veces son nuestros miedos irracionales los que nos impiden dar un paso importante, nos mantienen atados a una vida poco saludable, estancados en un trabajo horrible o una relación destructiva.
El miedo está bien si vives en la naturaleza y te sirve para huir de un oso, pero no es bueno si te impide hacer deporte, expresar tus opiniones o hablar con una chica porque temes hacer el ridículo. Está todo en tu cabeza. No es real, y la mejor forma de enfrentarte a él dentro de tu mente.

  1. Identifica tu miedo: hay algo que quieres hacer y no haces. Pregúntate a ti mismo si es por miedo a algo.
  2. Deconstruye tu miedo. Haz preguntas simples. No te atreves a pedir un cambio de destino a tu jefe porque tienes miedo. Tira del hilo de ese miedo:
    • ¿Qué puede pasar si pido el cambio? Que me despidan
    • ¿Qué pasará entonces? Que nunca encontraré otro trabajo
    • ¿Y qué pasará entonces? Que mi familia me abandonará porque no podré mantenerla
    • ¿Y entonces? Que caeré en una profunda depresión
    • ¿Y después? Que me veré viviendo en la calle, alcohólico y empujando un carrito de supermercado
    • ¿Y después? Me suicidaré.
  1. Toma la pregunta inicial y ponle a continuación  la conclusión final: “Si pido el traslado a mi jefe me suicidaré”. Ridículo, ¿verdad?
  2. Busca resultados alternativos que terminen bien: si pido el traslado le pareceré una persona con iniciativa y me considerará mejor. Si pido el traslado me dirá que no, pero se interesará por mi situación y me ayudará a mejorar.

Lo mismo sirve para acercarte a esa chico o chica que te gusta, vestirte de cocodrilo en carnaval, saltar en paracaídas, entrenarte para un maratón o emprender un nuevo negocio. Ponle cara y ojos al miedo, a lo mejor puedes reírte de él.
Foto:  @notnixon